Una reflexión desde la perspectiva farmacéutica
El farmacéutico, como agente sanitario, ha tenido un importante papel durante la pandemia. No obstante, en algunas ocasiones ha sido cuestionado, y en otros momentos ha tenido que luchar activamente para lograr un reconocimiento que le permitiera desempeñar distintas actividades para las que, sin duda, está perfectamente cualificado. Una de esas situaciones que ha generado controversia, en torno al farmacéutico, ha sido la dispensación y realización de test de antígenos para el SARS-COV-2.
En este trabajo se ha realizado un análisis de la evolución de la introducción y aplicación de test de antígenos para la detección del SARS-COV-2 en nuestro país. De una forma gráfica hemos intentado mostrar, desde el principio de la pandemia hasta el final de la sexta ola, el contexto en el que se han comercializado los test, el papel del farmacéutico y de otros profesionales. Terminamos realizando una reflexión crítica sobre aquellos aspectos que se podrían haber gestionado de forma más eficiente. Por ello, hemos incluido ideas sobre lo que objetivamente podría haberse hecho mejor durante este tiempo, ideas que habrían facilitado el proceso y el bien común y que revindican la necesidad de que el farmacéutico pueda participar en la sociedad con los conocimientos y competencias adquiridas durante su formación académica y profesional.
Somos conscientes de que es complicado expresar en un cuadro un proceso tan complejo como el que proponemos. Sin embargo, consideramos que, precisamente por su sencillez, es un buen medio para suscitar la atención y generar el interés por un tema que aporta elementos importantes para la reflexión, sobre la situación del farmacéutico como agente sanitario y sobre su integración en el equipo sanitario.
Gabriela Arranz Arsuaga
Beatriz Azcona Liberal
Silvia Gascón Corella
María Ros Núñez
Mónica Villanueva Echeverría
