Mato pide al nuevo comité de bioética que actúe bajo el principio de «igualdad».
Vía: La Información
SERVIMEDIA | AEFA Social
La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, presidió este martes la constitución del Comité de Bioética de España, al que pidió que actúe bajo los principios de «solidaridad intergeneracional» y de «igualdad».
A juicio de Mato, el nuevo comité «está llamado a realizar una importante labor en el estudio y análisis riguroso de temas de gran complejidad en el ámbito de la bioética».
En la misma reunión se propuso y eligió a la nueva presidenta del organismo, que será la doctora en Ciencias Económicas María Teresa López López.
El Comité de Bioética de España es un órgano colegiado, de carácter consultivo e independiente, cuyos miembros provienen de las áreas de conocimiento del derecho, filosofía, medicina, genética, biología, economía de la salud, etc.
La titular de Sanidad pidió a todos los integrantes del comité que tengan «en cuenta que las personas y la mejora de su salud y calidad de vida constituyen el principal objetivo de cada una de las actuaciones a realizar». Para alcanzarlo, prosiguió, el organismo ha de actuar siempre bajo dos principios: el de solidaridad y de cooperación intergeneracional e intrageneracional, y el de igualdad, para que nadie se vea discriminado por estar enfermo, ser mayor, tener discapacidad o por cualquier otra circunstancia.
El comité tiene ante sí retos como establecer los protocolos de actuación de los comités de bioética en los hospitales, o los criterios de formación de los profesionales, para garantizar las exigencias y consideraciones éticas en la toma de decisiones clínicas.
Las Tareas que ha de afrontar el nuevo Comité son:
- Revisar y recomendar las modificaciones oportunas de las leyes autonómicas que regulan los derechos de las personas al final de su vida de Andalucía y Aragón con el fin de eliminar las prácticas eutanásicas. Concretamente, ambas normas recogen el «derecho a la sedación terminal» por encima de la buena práctica médica y la adecuación terapéutica. Así mismo, las citadas leyes establecen la obligación, para el médico, de limitar las medidas de soporte vital cuando lo estime necesario (o lo soliciten pacientes o familiares) para evitar la «obstinación terapéutica»; sin embargo, al no diferenciar las medidas extraordinarias de soporte vital (ventilación mecánica) de los cuidados básicos (ordinarios) como la hidratación y nutrición, el médico puede estar obligado a privar de agua y alimentos a un enfermo provocando su muerte.
- Revisar las leyes 14/2006 (Reproducción Humana Asistida) y 14/2007 (Investigación Biomédica) y recomendar al Gobierno su adaptación a la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que excluye la posibilidad de registrar en toda Europa patente alguna que sea fruto de investigaciones que hayan implicado la manipulación y destrucción de embriones humanos, así como la utilización de éstos con fines comerciales e industriales.
- Instar al Gobierno a que derogue la Ley 2/2010 de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo y desarrolle una Ley de atención a las mujeres con embarazos imprevistos y de apoyo a la maternidad.
- Revisar, y en su caso informar al Gobierno, sobre los riesgos para la salud y las implicaciones éticas de la dispensación de la llamada «píldora del día después» (PDD).
- Solicitar al Ministerio de Economía y Competitividad que España se oponga a la financiación con fondos europeos de investigaciones con células madre embrionarias instando a que se dediquen los recursos a proyectos de investigación con células troncales adultas y células IP’s, que están cosechando éxitos notables, mientras que la investigación con células troncales embrionarias, tras más de 10 años de trabajos, no ha obtenido resultado terapéutico alguno.