El día 22 de febrero de 2020 tuvo lugar la VI Jornada AEFAS. El lema elegido en esta edición fue: “Farmacéuticos: redefiniendo una profesión milenaria para el siglo XXI”. La Apertura de la Jornada estuvo a cargo de Jesús Prieto (Vicedecano de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de Valencia), José López Guzmán (Presidente de AEFAS), Julio Tudela (Director de la Jornada) y Vicente Colomer (Secretario del MICOF Valencia).
La primera conferencia “Los servicios farmacéuticos: ¿Fin o medio del ejercicio profesional?”, tuvo como ponente a Guadalupe Beitia (Profesora de la Universidad de Navarra), destacó que “los servicios farmacéuticos no son un fin, son un medio, una herramienta “, y que “el trabajo del equipo sanitario debe estar basado en una práctica colaborativa, en la que se respete la autonomía de los roles”.
La primera mesa redonda abordo el tema de “Farmacia y Titularidad: ¿Asistencia o Negocio?” y estuvo moderada por Pilar Vercher. Luis de Palacio (Presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos españoles) señaló que “no existe contradicción entre asistencia y negocio”, que “el término negocio no hay que contemplarlo como beneficio, etimológicamente hace referencia a ausencia de ocio o diversión”, “debemos conseguir que las farmacias dejen de ser consideradas como establecimientos sanitarios y pasen a ser centros sanitarios” y que “el modelo no viene determinado por la propiedad sino por la ordenación”. Por su parte, Julio Tudela mantuvo que “el lastre para la evolución de la profesión no es la titularidad, el verdadero lastre es el estilo de financiación sobre el que se ha construido la farmacia asistencial”.
En la segunda Mesa redonda se reflexionó sobre “Deontología farmacéutica, legalidad, y objeción de conciencia: derechos en liza”. Estuvo moderada por Eva Martín. Margarita Lobo (Presidenta de la Comisión Deontológica del COF de Madrid) realizó una revisión de los principales problemas ético-legales que afectan a la profesión farmacéutica. José Antonio Díaz (coordinador General de la Asociación Española para la Defensa de la Objeción de Conciencia) detalló los pormenores y consecuencias de la Sentencia del Tribunal Constitucional de 2015 que reconoció la objeción de conciencia del Farmacéutico a la dispensación de la PDS. En su intervención manifestó que “el Código Deontológico de la profesión farmacéutica reconoce la objeción de conciencia en términos un poco vergonzantes”. Por último, José Ignacio Centenera (Vicepresidente AEFAS) habló sobre la dirección colegiada, manteniendo que “los colegios profesionales tienen que evolucionar o desaparecerán”, “muchos colegiados no se sienten representados por sus colegios” y que “la dirección colegiada como modelo puede servir para favorecer una evolución positiva del gobierno colegial”.
Conchita Tros (Universidad de Navarra) moderó la tercera mesa redonda, en la que se proponía dar contestación a la pregunta: ¿nuestra sociedad requiere de un nuevo tipo de farmacéutico? Enrique Soler (Jefe Servicio Farmacia Arnau de Vilanova) hizo alusión a la necesidad de contar con las nuevas tecnologías, “hay que tener en cuenta el core de la Profesión Farmacéutica … responsabilidad técnica, de adquisición, conservación y custodia, elaboración, dispensación informada…pero sin olvidar que nuestra sociedad se está moviendo en internet” y alertó sobre el peligro del conformismo con la rotunda afirmación de que “hay que salir de la zona de confort”. Fidel Ortega (Académico RANF) afirmó que “universidad, sociedad y profesión no siempre coinciden en lo que consideran necesidades” y que “el gran reto para la profesión farmacéutica es la Formación Especializada: medicina de precisión personalizada, nueva farmacia industrial, terapias avanzadas, expósitas, etc.)”. Por último, Alicia López Castellano (Decana Facultad de Ciencias de la Salud CEU Cardenal Herrera) partió del hecho de considerar la Farmacia como un espacio para la gestión de la Salud, después señaló que “nuestro foco debe ser el paciente y hay que dar importancia al farmacetic@digital”, todo ello sin olvidar que “la clave del nuevo Farmacéutico está en la formación”.
La última mesa redonda se centró en mostrar la visión que tienen los nuevos Farmacéuticos y los agentes sociales sobre la profesión farmacéutica. Sagrario Crespo (Universidad Francisco de Vitoria) moderó las intervenciones de María García Amesto (Asociación universitaria Ápex), Roberto Gimeno (doctorando CEU Cardenal Herrera), Eradio Ezpeleta (sociopolitico), y Alicia Josa (Presidenta FEEF). María García señalo la importancia de poner al paciente en el centro de nuestro trabajo, “en la carrera solo nos hablan del medicamento, no del paciente”, “como estudiantes de farmacia nos sentimos, en muchas ocasiones, cuestionados por vernos como vendedores no como profesionales de la salud”, “el paciente es único e irrepetible”. Roberto Gimeno destacó que “al hablar del Farmacéutico siempre se hace referencia al medicamento, pero no hay que olvidar que detrás de cada medicamento hay un paciente”, y que hay que tener presente que “la relación de confianza que el Farmacéutico establece con el paciente es más estrecha que la que tienen los otros profesionales de la salud”. Eradio Ezpeleta tuvo una aportación fundamental al mostrar, a los farmacéuticos asistentes, como eran contemplados por la población: “un eslabón fundamental de la cadena sanitaria al que se puede ir sin cita previa”, pero que a su vez “quieren que la farmacia siempre esté abierta, que el farmacéutico esté identificado, que ofrezca confianza, que no se aproveche del paciente o consumidor…”., terminó su intervención manteniendo que “la sociedad no conoce realmente cual es la verdadera labor del Farmacéutico”.
La Jornada concluyó con una magistral intervención del Director de la Jornada, Julio Tudela, en la que fue exponiendo las mejores frases de la Jornada para que los asistentes fueran identificando al ponente que las había manifestado.
La VI Jornada AEFAS se desarrolló en la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir, y estuvo organizada por la Asociación Española de Farmacia Social en colaboración con el Observatorio de Bioética de la Universidad Católica de Valencia, Cinfa y Bancofar.