Vía: Salud pública, ética y sociedad
Recientemente un editor del British Medical Journal destacaba el creciente interés de las grandes compañías tabacaleras por los cigarrillos electrónicos. En el artículo trata de responder si esto es una buena o mala noticia.
Más adelante escribiré algo sobre los cigarrillos electrónicos y la salud pública en general. Pero en esta entrada quiero ser menos ambicioso y centrarme en una de las estrategias en las que se basa la publicidad de este tipo de productos: la libertad.
Esta es la estrategia seguida por una de las compañías del sector y que ha venido empleando en diversos spots publicitarios, como la imagen poco convencional del anuncio de arriba. Está claro el mensaje que esta «respetable» señora envía a las normas que prohíben el tabaco.
El mismo mensaje lo realiza un actor, Stephen Dorff, en un anuncio de la misma marca:
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El anuncio está en inglés, ya lo siento. El actor empieza diciendo que está «cansado de ser un cenicero andante…de sentirse culpable cuando enciendo un cigarrillo». Más adelante se dirige a los adultos exhortándoles que es tiempo de recuperar la libertad.
Si había que recuperar la libertad, tendremos que asumir que ésta se había perdido previamente. Resulta un argumento al menos curioso cuando durante años lo que hemos soportado ha sido la ocultación de la verdad por parte compañías tabacaleras, la adicción de millones de personas al tabaco y otros tantos millones de fumadores pasivos. Querido Stephen, me vas a permitir que ponga en duda que con estos productos se recupere esa tan ansiada libertad.
Foto vía: KaiChanVong vía photopin cc